Las máquinas de hidroterapia son dispositivos que generan gas hidrógeno para su inhalación o consumo con el fin de aportar beneficios a la salud. El gas hidrógeno es un gas incoloro, inodoro e insípido que es el elemento más ligero del universo. También es el elemento más abundante en el universo, constituyendo alrededor del 75% del universo en masa. Se ha demostrado que el gas hidrógeno tiene propiedades antioxidantes y puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo, y se ha demostrado que tiene una serie de beneficios para la salud, que incluyen:
Reducir la inflamación
Mejora de la función celular
Protección contra el estrés oxidativo
Reducir el riesgo de cáncer
Mejorar la salud del corazón
Mejorar la función cerebral
Reducir el riesgo de las enfermedades de Alzheimer y Parkinson
Mejorar el rendimiento deportivo
Aumento de la longevidad
Algunos estudios sugieren que la terapia con hidrógeno puede ser beneficiosa para una variedad de condiciones de salud, incluida la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la artritis reumatoide e incluso el cáncer.
Las máquinas de terapia de hidrógeno funcionan generando gas hidrógeno y luego entregando el gas al paciente a través de una cánula nasal o una máscara facial. Luego, el paciente inhala el gas de hidrógeno y se absorbe en el torrente sanguíneo a través de los pulmones. El gas de hidrógeno luego viaja por todo el cuerpo, donde puede proporcionar sus muchos beneficios para la salud.
Hay diferentes tipos de máquinas de terapia de hidrógeno disponibles en el mercado, incluidos generadores de agua con hidrógeno, inhaladores de hidrógeno e ionizadores de agua ricos en hidrógeno. Estos dispositivos generalmente funcionan electrolizando agua para producir hidrógeno molecular, que luego se puede consumir o inhalar.
Es importante tener en cuenta que, si bien la terapia con hidrógeno puede mostrarse prometedora como un tratamiento potencial para ciertas afecciones de salud, se necesita más investigación para comprender completamente sus beneficios y riesgos. Como con cualquier terapia alternativa, siempre es mejor hablar con un profesional de la salud antes de comenzar un régimen de terapia de hidrógeno.